Los medios se esfuerzan en marcarle el camino a Chunta Aragonesista con encuestas en sus páginas web, con páginas enteras de artículos informativos, con opiniones de contertulios que enseñan caminos previamente elegidos, en un sinvivir para Aragón. Porque curiosamente de Aragón se ocupan poco, cuando hablan del camino que debería tomar CHA. Y Aragón está en un sinvivir.
En un sinvivir no por CHA —a la que los aragoneses tienen olvidada cuando no amortizada— sino por su realidad económica, social, “despoblacional” sobre todo, con un futuro cuando menos complicado estando rodeado de vecinos cuervos ávidos de salir de caza. Pero en Aragón nos comportamos siempre como si fuéramos una sucursal de Madrid. Y lo somos. Pero la sucursal pobre, la de los buenos chicos, la del desierto. ¿Eso es lo que queremos?
De las cinco opciones que daba ayer como posibles, efectivamente sólo dos de ella parecen válidas. Presentarse solos o no presentarse es morir en el intento. Ir con el PAR es una acción impensable de realizar en la rapidez del momento pues esta unidad de acción del aragonesismo se tendría que haber fraguado lentamente y con sumo respeto mutuo, algo que ahora no existe todavía.
Queda pues y aquí es donde entran los medios a medrar, las otras dos opciones. Ir de la mano de Podemos e ir de la mano del PSOE. ¿Y qué es mejor para Aragón? ¿y qué es mejor para CHA? Esto ya me lo preguntaba yo ayer.
Ambas formaciones, el PSOE y Podemos, han demostrado en sus años de vida una falta de respeto hacia CHA que preocupa. Que seamos “pocos” y pequeños no quiere decir que no seamos “muchos” y con rasmia. Y no quiere decir que Aragón necesita mucho a una CHA, y siempre, se llame como se llame. Antes, en los tiempos de casi maricastaña, estuvo el PSA, ahora está CHA y sin duda cuando toque estará otra organización aragonesista y de izquierdas. O no estará Aragón. O estará convertida en un desierto de paso, pues no lo pueden cortar y tirar.
¿Alguien tiene dudas de que Aragón debería ser más fuerte, por la simple razón de que somos tan pocos que o somos capaces de levantar la voz o se nos comerán los mocos todos los vecinos?
Esto, los aragoneses que dicen estar orgullosos de ser aragoneses no lo comprenden. Es curioso pero no se lo creen. No votan ni al PAR ni a CHA. Se conforman con decir que ambos somos una mierda. Pero curiosamente tampoco entran dentro de nosotros para cambiar esa mierda y hacerla diferente. En CHA es muy sencillo entrar y participar, lograr que tu voz se escuche (no se oiga, se escuche) y además de participar conseguir que se cambie. Lo repito. MUY SENCILLO. Pero los aragoneses prefieren ser entrenadores de lunes. Que sí, que sí, que me estoy refiriendo a ti. Ya siento ser tan crudo.
Ahora está de moda decirle a los españoles —y por ello también a los aragoneses— qué es malo y qué es bueno. Como a los niños. No votes Podemos que es caca. Incluso el Jefe de la Policía nos lo dice. Caca, pupa.
Ayer entre los comentarios de los medios por los lectores, se decía de CHA que éramos catalanistas, separatistas, comunistas, atrapasillones y vagos. Jodo.
Catalanistas.: No. Defender el catalán como idioma oficial de Aragón junto al aragonés y al castellano no es ser catalanistas. Ser un partido que se quiere llevar bien con todos sus vecinos no es tanto como para llamarnos catalanistas. Nos encanta Soria, La Rioja, Navarra y Valencia. Tenemos excelentes relaciones con el sur de Cataluña como es lógico, y ellos con nosotros. Pero no CHA, sino sobre todo los aragoneses. Las relaciones con Cataluña son duras, complejas, y sin duda a los que más jode algunas acciones de los catalanes que no quiere reconocer su historia es a los aragoneses.
Separatistas.: Je je. No. No quiero entrar en el debate profundo de esta opción, simplemente no queremos ser separatistas pues somos inteligentes y sabemos sumar. CHA no quiere ser separatista de nadie ni de nada. Eso sí, nos jode un huevo la falta de respeto, la ninguneo por ser pocos, el olvido histórico, el no reconocimiento a nuestra importancia en esta España actual. ¿Lo habéis visto? He escrito España y no se me ha caído el teclado. Otra cosa es que yo personalmente sí creo en el Derecho a la Autodeterminación aunque nunca desearé para Aragón una separación de España. Hoy toca Europa y el resto son asuntos menores. Somos aragonesistas de izquierdas, socialmente muy responsables de todo lo que supone abuso de unxs sobre otrxs.
Comunistas.: Tampoco. Somos socialistas porque así lo queremos y así lo dice nuestro Estatuto. Si alguien piensa que el comunismo y el socialismo es parecido, que se lo haga mirar, que lea un poco, que lea no tanto filosofía política y económica como historia de España e historia de Europa. Las diferencias entre comunismo y socialismo son grandes.
Atrapasillones.: Je je je. Los cargos públicos de CHA —muchos menos de los que deberíamos tener— son todos licenciados en diversas materias y Universidades. Son personas con una gran experiencia en numerosos temas que ganarían más sueldo trabajando en actividades privadas que políticas. Eso sí, estar en política les encanta, les tiene atrapados. Si hay duda, me gustaría que se pudiera escuchar a las parejas de estos cargos públicos y orgánicos de CHA (y de cualquier otro partido político) y preguntarles si ellos y ellas, como parejas de los políticos, preferirían que sus parejas trabajaran de funcionarios, en una empresa o en la política. Yo sé la respuesta. Vosotros también.
Vagos.: Uff!. No voy a enumerar el enorme trabajo de Labordeta y sus colaboradores en el Congreso o de Yuste y los mismos en el mismo Congreso. Ya se han publicado los números. Las comparaciones con otros políticos aragoneses dan miedo cuando no asco. Podría referirme al Ayuntamiento de Zaragoza que lo conozco bien o a la DGA y el Gobierno de Aragón, a las Cortes o a la DPZ. Podría enumerar el trabajo que desarrollan los Vocales de CHA en sus Distritos. Pero no quiero. Simplemente sonrío y ya acabo. Por cierto, además de muy trabajadores, mucho más de lo que yo les recomiendo siempre que puedo, son muy honrados pues en CHA todavía no nos han podido acusar de ninguna trampa. Y no será porque no lo hayan intentado.
Julio M. Puente Mateo