Pues
sí, le toca el turno en aragoneses. Por qué ahora, por qué a este aragonés
natural de la Vall de Barrabés, tío de Marcelì Iglesias –todavía virrey emérito
de este país nuestro-, ambos familiares lejanos de Pau Donés. No le toca por su
permanente amistad con Sender y Ramón Acín. Tampoco por su interesantísimo
exilio en Nueva York.
El
actual momento político augura la constitución de agrupaciones de unidad de la
verdadera izquierda. No de un Frente Popular que dice la caverna mediática en
parte aragonesa, Losantos. El PSOE no es ni largo ni mucho menos caballero.
Tampoco goza de estadistas como Besteiro. Cualquier parecido con algo obrero
nos conduce a los beneficiarios por
comisión de sus ERES. Así que a eso vamos, no a un Frente Popular.
Maurín, esa mirada
montañesa. No ha sido precisamente recibida en herencia por…
En
el mismo y para su éxito, en Aragón la consecución de políticas sociales y
aragonesas reales, Joaquín Maurín nos indica el camino, no su sobrino.
Tan
montañés que prefirió ser cabeza de ratón como la CHA y no cola de león. Así lideró
el bloque campesino de la CNT en la Barcelona convulsa de los años 30… y no dejó mal recuerdo en ninguno de sus
adversarios políticos. Ni en Companys, ni mucho menos en Andreu Nin, trotskista
asesinado y para mí la figura más interesante en el campo republicano.
Finalmente, en un ejercicio de libertad que seguro que tuvo muchos riesgos, con
Durruti campando por Barcelona, se unió a este último.
En
cualquier caso, a mí me interesa de él más su lado personal, su exilio
neoyorkino. Que en la política estuviera de paso, que fuera luego un gran
profesional de la cultura.
Que
eligiera como Galíndez y el PNV Nueva York como destino –gran libro de
Montalbán-. Y que una vez allí se dedicara a la promoción de la cultura
—volviendo a sus orígenes con Ramón Acín en Huesca—. Que representara a Ramón
J. Sender y fundara una agencia de prensa, dedicándose asimismo al periodismo
hasta su muerte en 1973 dan prueba fehaciente de la magnitud de la obra de este
montañés. Menuda vida.
El Nueva York de
Maurín fotografiado por la francesa Michèle Maurin… No son familia, también es
casualidad.
Lo
homenajeamos con una letra de Pau Donés
que le va como anillo al dedo a este amante de la vida sencilla. Haremos lo
inverso cuando hablemos de Pau, que está pasando por malos momentos personales:
le haremos un homenaje desde su Aragón.
No
parece que Joaquín Maurín pasara por la vida de la gente sin agarrarles bien todo el
brazo y mirarles con esa mirada profunda.
GRITA
Hace días
que te observo y he
contado con los dedos
cuantas veces te has reído una mano me ha valido.
Hace días que me fijo no sé que guardas ahí dentro
a juzgar por lo que veo nada bueno, nada bueno.
Hace días que me fijo no sé que guardas ahí dentro
a juzgar por lo que veo nada bueno, nada bueno.
te tiendo la mano tu agarras todo el brazo, y si quieres más pues, grita!
05/04 Luis Iribarren.