Hoy nos habla Heraldo de Aragón del grave estado de deterioro de parte del patrimonio aragonés antiguo, que no recibe la suficiente atención presupuestaria para mantenerlo en pie. El texto superior es el Editorial de Heraldo. Es cierto, no se puede decir nada que no sea asentir. Pero sí tal vez, añadir algunas pinceladas muy necesarias.
En dos páginas interiores se hace un recuento de los espacios y edificios en muy mala situación, cuando no ya totalmente irrecuperables, Nadie habla ya del Teatro Fleta. Pero el abandono ha venido desde todos los frentes, también desde los medios de comunicación, que cuando se han cometido errores graves desde algunas instituciones más amigas, los silencios han acompañado a las noticias deportivas para llenar las hojas. La actual situación viene de lejos, de varias décadas. Podrmeos decirnos a nosotros mismos que la crisis lo está agravando. Es bueno tener chicos en casa para lanzarles todas las culpas. Pero cuando no había crisis económica nos gastamos los millones de Motorland en vez de en conservar el patrimonio que construyeron nuestros abuelos.
El Patrimonio de Aragón, es decir de los aragoneses, pasados, actuales y futuros, da forma de vida y ayuda a vertebrar el territorio, a sujetar población, a crear economías donde están asentados. No se trata de sujetar “unas piedras” sino de poner en valor las posibilidades de que los territorios puedan atraer a visitantes, sepan defender lo suyo para crear economía allí donde está asentada la misma, esperando que no se caiga del todo.
Ermitas, palacios, iglesias, castillos, monasterios, torres defensivas, pinturas, edificios civiles de interés histórico, pueblos enteros, edificios de otras culturas, yacimientos arqueológicos. Si Aragón no sabe cuidar su patrimonio histórico y cultural…, ¿qué nos quedará de Aragón, de aragoneses, de aragonesistas?
J. Puente