4.2.17

Felicidades a Economía y Vertebración, por el éxito con Guissona

Tras culminarse la primera fase de la negociación con la Cooperativa Guissona para su instalación en Épila, Valdejalón, ayer se firmó el primer documento que da la salida a una gran inversión de BonÁrea hacia Aragón para montar un complejo de producción y distribución que dará trabajo a cerca de 4.000 personas en los próximos años, si todo funciona con arreglo a los proyectos planteados para su expansión por toda España.

Guissona es una empresa que nació como una cooperativa y que ha crecido creando riqueza en su comarca de origen y de la que forman parte ya muchos aragoneses como proveedores y clientes.

Ha decidido crear su segundo centro industrial en Épila, en una parcela de 140 hectáreas desde donde distribuirá sus productos a todos sus futuros centros en País Vasco, Navarra, La Rioja, Valencia, Castilla–León y Madrid, por supuesto, incluido Aragón.

Su puesta en marcha supone la creación de más de 3.500 puestos de trabajo directos que afectarán muy positivamente y de forma muy especial a  todas las comarcas próximas a Valdejalón.

Las negociaciones se han desarrollado con un equipo constituido por Presidencia del Gobierno y los departamentos de Economía y Vertebración del Territorio. A partir de hoy, el papel de estos dos Departamento, serán determinante, ya que su tramitación se realizará a través de un Proyectos de Interés General de Aragón (P.I.G.A.), proyecto que incluirá todas las expropiaciones, así como toda la tramitación urbanística y la labor urbanizadora. Trabajos que se tienen previsto desarrollar durante los dos próximos años.

Estamos ante un proyecto anclado en el sector primario: agricultura y ganadería, que supone la puesta en valor y de la potenciación de la agroindustria como motor de desarrollo propio en Aragón. Un proyecto de la economía real que llevará desarrollo tanto en explotaciones agrícolas como ganaderas situadas en Aragón.
 
Es un elemento clave de Vertebración para las comarcas de Valdejalón, Aranda, Ribera Alta, Cariñena y Comunidad de Calatayud, es decir, un factor de desarrollo para todo nuestro territorio.