La torre mudéjar de la tercera Catedral
de Zaragoza, la iglesia de San Pablo, la vemos normalmente desde abajo, con una
perspectiva típica que ahora podemos ver de frente desde la terraza del Museo Pablo
Serrano.
Torre campanario mudéjar de principios del siglo
XIV, octogonal y con 66 metros de altura, con una escalera de caracol que
permite a algunas personas privilegiadas, subir para contemplar unas vistas de
Zaragoza diferentes a las habituales.
En realidad son dos torres, una dentro de
otra, dejando un espacio entre ellas por donde está construida la escalera. En
principio era una torre separada de la propia iglesia, que al aumentar de
tamaño abrazó la torre dentro del templo.
Como torre campanario era el medio de
aviso para todas las actividades del Barrio del Gancho, fueran religiosos o no.
Sus campanas se escuchaban en una zona de la ciudad que llegó a albergar tantos
habitantes casi como todo el resto de Zaragoza. Como curiosidad hay que añadir
que en lo alto de la torre todavía se conserva una “matraca de torre” que es un gran aparato de madera para sustituir a las campanas en la Semana Santa,
en que está prohibido el sonido metálico de estas.