La iglesia del Real Seminario de San Carlos Borromeo de Zaragoza fue construida dentro de un gran edificio en el siglo XVI por la Orden de la Compañía de Jesús y con el nombre de Colegio de la Inmaculada, en el mismo solar donde estaba la Sinagoga Mayor de la judería de Zaragoza. Una hermosa iglesia barroca que se terminó en el siglo XVIII. El retablo mayor que vemos en la imagen es sustituto de uno anterior renacentista, y se situaría en la época en que se produjeron las modificaciones interiores del templo hacia el estilo barroco y rococó bajo la dirección del hermano lego jesuita Pablo Diego Ibáñez.
Tras la expulsión de los jesuitas de España en 1767, se le cambió el nombre a la iglesia por el actual de San Carlos Borromeo.
En el Altar Mayor destaca el retablo de la Inmaculada Concepción en madera dorada y colores vivos (rojos, turquesas, rosas), con casi excesivas decoraciones con motivos florales, que nos acercan al rococó. Tiene en total 18 esculturas de tamaño natural, y 25 ángeles querubines de tonos muy vivos, a lo que tenemos que sumar, otras 11 esculturas de distintos santos, elevados sobre peanas dispuestas ante los pilares de la nave central. Casi un exceso que se puede contemplar en esa Zaragoza que no siempre es bien conocida por los zaragozanos y mucho menos por los turistas que nos visitan.