Pasó la Semana Santa, hemos vuelto al trabajo diario pero no está de más recordar que a veces en esto días se pueden visitar algunas iglesias normalmente con poco acceso y que nos pueden mostrar algunas obras realmente interesantes. La iglesia del Real Seminario de San Carlos Borromeo de Zaragoza es visitable, pero no siempre con suficiente luz, y es cierto que necesita una buena limpieza para dotarla del esplendor que necesita tamaño edificio del siglo XVII. Más que limpieza, tratándose de todo un conjunto artístico, de una restauración de mantenimiento, para que no desaparezca el color. Os dejo un retablo mostrando el momento en el que Cristo es clavado en el suelo, ya montado sobre la cruz.