Hace bien Chunta Aragonesista, de la mano
de su presidente José Luis Soro, al presentar una enmienda a la totalidad a la
iniciativa del PP y PAR para actualizar la Ley de Derechos Históricos.
Este temor a mal entendidos y a la baja,
como ya sucedió en nuestro Estatuto de Autonomía al entrar por el artículo 143,
sigue limitando nuestra capacidad de autogobierno y nuestro peso con respecto a
otras comunidades.
Aragón es mucho más que un elemento
fundacional de la unidad de España pero nos relegan a la segunda categoría y no
podemos ni debemos ser menos que el País Vasco o Navarra. Tenemos naturaleza
foral como éstas y el mismo derecho de autogobierno, régimen tributario y de
hacienda.
Actualicemos esa Ley, manteniendo sus
orígenes, blindándola para que ningún gobierno central nos pise o ignore
nuestros derechos como aragoneses y como nacionalidad histórica, aunque el PP,
PAR y PSOE hayan querido desvirtuar estos derechos.
Comunidad laicista, blindaje a los
servicios públicos para que nuestros ciudadanos estén protegidos y, entre otras
leyes, que nos refuercen la voluntad de lo que queremos ser. El regreso de
nuestro patrimonio en Lérida, en Salamanca o en el Museo Arqueológico Nacional,
tendría que ser prioritario. Participar de manera destacada en el Archivo de la
Corona de Aragón (ocho años ausentes) y potenciar nuestros Símbolos, lengua e
Himno de Aragón, (que por cierto, no puede ser otro que el que conocemos y
cantamos todos, el Canto a la Libertad).
Tenemos los aragoneses con los fueros del
siglo XIII el privilegio y orgullo de ser pioneros en España y Europa en
administración de justicia y democracia; en derechos y libertades anteriores al
resto de comunidades y que aún están vigentes. Sepámoslas defender
y administrar, porque es nuestro presente y nuestro futuro forjado en un
pasado. ¿Quién se puede permitir renunciar a tanto patrimonio?
Daniel Gallardo Marín