El Ebro a su
paso por Zaragoza sigue siendo una riqueza viva, pero también un gran río que
tiene un peligro que no siempre valoramos en todos sus términos. Hoy nos
resulta muy complicado entender que el río Ebro a su paso por Zaragoza pudiera
tener un cauce diferente al que ya tiene, perfectamente llevado entre cemento
en muchos tramos, dominado y controlado desde aguas arriba por diversos sistema
de control. Pero no debemos olvidar que en otros tiempos históricos, tanto el Ebro
como el Gállego y el Huerva llegaron a tener a su paso por la ciudad de
Zaragoza diversas configuraciones de cauces de los que hay constancia en la
historia.
Os dejo un
plano de Zaragoza con los cauces más conocidos de los tres ríos de Zaragoza. En
azul claro el cauce actual del Ebro, Gállego y Huerva y en azul oscuro algunas
de las diversas variables que han tenido a su paso por nuestra ciudad. En rojo
lo que sería la ciudad romana, con el límite en el actual Coso.
Cuando
hablamos de las Balsas de Ebro Viejo estamos simplemente refiriéndonos al cauce
de un Ebro viejo, que durante siglos dejó inundaba toda o parte de la zona del
Actur, Picarral o Arrabal. Algo parecido se tiene constancia en la zona de Camino
del Vado, Vadorrey, etc, con cauces tanto del Ebro como del Gállego que
inundaron estas zonas de Zaragoza.