Terminada la campaña electoral y en plena jornada de
reflexión que apuraremos con el fútbol, tal vez toque reflexionar también sobre
la campaña electoral desplegada en Zaragoza.
El papel ha brillado poco por las calles con la curiosidad
de algún partido pequeño que si ha inundado barrios, sin saber nadie (o nos lo
callamos) de donde ha sacado tanta pasta para tanto impreso. El PP casi ha
estado en su tónica pero el resto ha bajado los gastos bastante, dejando a las
Artes Gráficas con más pena que gloria.
Los vídeos de televisión han sido flojos. El que más me ha
gustado ha sido el del PP, mejor hecho, con frases más acordes con lo que
intentan vender, más profesional, más de campaña. Flojo el del PSOE, es de los
peores. Se salva el de IU y no llega al aprobado el de UPyD. El de CHA me ha
gustado, tal vez falto de un poco más de naturalidad en Ángela Labordeta, que
en estas semanas ha mejorado mucho en el saber estar ante las cámaras.
En cuanto al trabajo de “calle”, mítines y similares, la
cosa está entre mala y floja. Este sistema hay que cuidarlo de otra manera,
debe cambiarse y repensar totalmente. Solo algunas bocanadas de nuevos partidos
han logrado levantar ánimos y presencias. El resto se han medio llenado o
vaciado de parte de los incondicionales que no se quieren perder la cara de los
primeros espadas por si se pueden hacer una foto con ellos. Muy poca cosa para
una campaña.
Poca Europa en todo el tinglado, mucha economía y desempleo,
bastante Canfranc y PAC, mucho apelar a que ahora es el momento de la gente.
Pero la gente no se lo cree, no escucha ya.
¿Qué no digo nada de los debates? Mirar, el de a seis con
los candidatos aragoneses, si no fuera por CHA e IU, sería para enmarcar y
estudiarlo en las clases de política. “Clase de lo que NO se deba hacer NUNCA”.
La candidata del PP, Verónica Lope no estuvo a la altura de sus vídeos
electorales por muchísimo. Inés Ayala del PSOE dio mucho menos, pero mucho
menos, de lo que daba cuando era joven y se comía los mítines sindicales. Los
dos candidatos menos duchos en salir en televisión ante un trabajo como este —Labordeta
e Iturbe—, se comieron con patatas a las avezadas Lope y Ayala. Así no se
asciende, señoras.