La Dirección General de Protección de Consumidores y Usuarios en Aragón nos ha brindado unos consejos generales a tener en cuenta cuando efectuamos compras por internet, algo que sin duda está en constante aumento pero que debe regirse desde el consumidor por los mismos sentidos comunes que ante cualquier otra compra, excepto por los particulares del medio de compra y pago empleados.
La página web debe mostrar los datos de la empresa que ofrece el producto, el nombre, domicilio social, un teléfono de contacto y el horario de atención en el que se puede llamar.
Verificar las distintas formas de pago que ofrece el sitio web para ver cuál se adapta mejor a nuestras preferencias. Los sitios web deben ofrecer distintas formas de pago tanto online, mediante tarjeta bancaria, como off line, contra-reembolso, en efectivo, por transferencia. Este aspecto garantiza la flexibilidad y comodidad del consumidor adaptándose a las necesidades de cada uno.
La página electrónica deberá indicar detalladamente el procedimiento a seguir en caso de devolución o reclamación, precisando a cargo de quien corren los cargos de envío tanto en la compra como en la posible devolución.
En el momento del pago mediante tarjeta bancaria, la dirección de la página principal debe cambiar, de la típica http:// deberá pasar a otra que empiece por https//:. La letra “s” que se añade confirma que se trata de un sitio seguro. Cuando aparece un símbolo de un candado en el pie de la página, también nos garantiza que la página es segura para comprar a través de ella.
Es importante leer la descripción y características del producto para comprobar si es completa o se omiten algunos aspectos del producto que podrían ser negativos. La red facilita la comparación de productos y la búsqueda de los mejores precios pero no hay que olvidar que normalmente los productos conllevan unos gastos de envío que siempre deben venir indicados.
Un lugar que se actualiza continuamente con nuevas ofertas es símbolo de fiabilidad porque demuestra que está en movimiento y no es un gancho para posibles estafas.
Comprobar la política de privacidad de un sitio web es fundamental para saber qué datos nuestros se recopilan, para qué fines y cómo podremos cancelar esos datos. El número de la tarjeta bancaria únicamente habrá de darse cuando sea estrictamente necesario y en lugares con una comunicación segura.
Utilizar un navegador actualizado con distintos niveles de alertas nos avisará cuando entremos en un sitio con bajo nivel de seguridad para realizar operaciones de compra o venta.
Realizar las compras desde lugares seguros, no introducir datos bancarios o personales en equipos públicos que tienen muchos trasiego de gente como los de los cibercafés, ordenadores compartidos...
Conservar una copia en papel impreso de la confirmación de la compra como comprobante.