No sé bien por qué las universidades en castellano no están inundando la red de clases magistrales como sucede en EEUU. La propia Universidad de Zaragoza debería recoger la idea de universidades inglesas o americanas y empezar a trabajar con poco coste la transmisión libre de materiales formativos de variada temática, como elementos que ayudan a la formación pero también como manera de dar a conocer lo bien que se trabaja en España la formación complementaria y lo poco que se aprovecha.
La propia Universidad de Zaragoza organiza conferencias para máster o jornadas técnicas que se pierden en el aire mientras tienen una asistencia presencial baja. Es una auténtica lástima, un enorme despilfarro, que no seamos capaces de compartir más democráticamente estos ejemplos de formación de alto nivel, quedando colgada en la red para su consulta desde España o desde fuera de ella, como organizan diversas universidades de todo el mundo. El futuro es la formación de calidad, hay que abrirla, hay que reproducirla, abaratarla, distribuirla para intercambiarla. Si como país queremos crecer debemos cuidar más la innovación y valorar más la formación con el elemento aglutinador del castellano como base.
La inversión para que las universidades españolas estén presenten en la red es muy baja y sus costes son en casi su totalidad los sueldos de jóvenes licenciados que hoy están desempleados.