Está claro que en Aragón somos singulares contra
viento, marea y presupuestos. Que lo que aquí pasa en Aragón, en el ámbito social, festivo y
educativo en forma de festivales, no tiene parangón.
Hay una carrera además saludable de los municipios para que dichos eventos se celebren en lugares recónditos, fuera de temporada y con alcance mundial.
Lo que que sean fuera de temporada está planteado innumerables rechazos como en el caso de Dènia, donde se quiere cambiar a final de septiembre la fiesta de moros y cristianos que surge de la sociedad civil. Es un conflicto del que tomar nota y aprender.
Pero en Aragón, tenemos más libertad por soledad, lo que no siempre es negativo, y nuestra imaginación se desborda.
Tenemos dos ejemplos paradigmáticos. El festival de parchís de El Grado/Lo Grau y el que aquí se presenta y al que los afiliados a la redolada de Zaragoza podemos ir porque es compatible con nuestro encuentro anual de Cuarte.
Alpartir, además, tiene una relación singular con
Japón a la que también dedicaremos una entrada y de la que nos ocupamos en la
Asociación Aragón Japón.
Luego está su fascinante proyecto educativo con implicación de los padres en el día a día de su escuela integrada. Enhorabuena por todas estas iniciativas nunca impedidas sino alentadas por su Ayuntamiento.
Luego está su fascinante proyecto educativo con implicación de los padres en el día a día de su escuela integrada. Enhorabuena por todas estas iniciativas nunca impedidas sino alentadas por su Ayuntamiento.
29/09 Luis Iribarren.