15.9.16

Violeta Barba supone mucho más que un cambio de sillón

Hoy Aragón tendrá la oportunidad de escribir con renglones bien rectos lo que puede ser un nuevo camino para la izquierda en todo el Estado, pero sin duda un gran paso para la izquierda en Aragón. Violeta Barba, diputada de Podemos  se va a convertir este jueves en la Presidenta de las Cortes de Aragón, tras un acuerdo entre el PSOE, Podemos, CHA e IU.

Las negociaciones entre PSOE, Podemos, CHA e IU han dado lugar además a la firma de un "Acuerdo para el impulso de las políticas progresistas en Aragón", en el que las fuerzas firmantes se comprometen a mantener el diálogo abierto de cara a la aprobación de legislaciones de carácter social y la negociación de unos presupuestos con este mismo sesgo.

Sin ninguna duda el papel del PSOE a través de Javier Lambán ha sido fundamental para este acuerdo, que sentará las bases de otra forma de entenderse, de trabajar, de resolver problemas. Aragón necesita entender más y mejor a sus representantes políticos. Y las izquierdas en Aragón deben entender mejor a sus ciudadanos y votantes, que admiten la pluralidad de siglas y organizaciones, pero desean que se pongan a trabajar juntos.

A veces confundimos el trabajar “juntos” con el trabajar fusionados; el trabajar mezclados con el trabajar dominados. Excesivas veces nos sentarnos en una mesa personas de diferentes pero parecidas ideologías, simplemente a demostrarnos el odio y las diferencias, en vez de mostrar las capacidades de respuesta a las necesidades sociales. La izquierda puede y debe ser plural y distinta entre ellas, pero debe aprender a trabajar junta. Y aquella persona —con perdón tremendo a mis compañeros de todo tipo, que puedan pensar así— que crean que cuanto más cerca, más grande es el enemigo, le aconsejaría que se fuera al desierto, donde no hay compañerxs de camino, ni casi problemas, ni casi enemigos. Pero tampoco hay soluciones para los problemas.

Aragón podría tomarse este nombramiento apoyado desde el PSOE, Podemos, CHA e IU, como algo coyuntural y cometer con ello un gran error, perdiendo la posibilidad de abrir nuevos caminos lógicos. Los militantes de toda la izquierda de Aragón podríamos seguir pensando que nuestros enemigos están cada vez más cerca. Podríamos seguir remarcando las diferencias en vez de abrazar las similitudes. Pero con los problemas que tienen Aragón, estaríamos caminando hacia el desierto otro poco más. Y no debemos buscar culpables nunca, si los responsables somos todxs nosotrxs.
 
Julio Puente Mateo