Ángel Orensanz pastoreaba por las montañas de Larués a su ternasca
edad de 5 años cuidando de su rebaño de crabas. Allí coincidía con mi madre,
que lo recuerda. Las obellas y crabas de Berdún, Larués, Martes o Bagüés
pastaban el monte prepirenaico, término Canal de Berdún, conocido por El
Sotillo o Ansotiello.
La cañada real ansotana por allí discurría para alcanzar la
Hoya de Huesca y, según se decía, los ansotanos solo querían correr fincas y
avanzar por caminos que hubieran comprado antes. De allí el nombre del monte,
el Pequeño Ansó. Si no es por eso, aunque así me lo han referido, no deja de
ser bonita y propia del carácter ansotano la vuelta dada.
Este monte que ya no corren mas que becaderos –hay un alarmante
abandono del ovino y es un factor de subdesarrollo rural que atender en este
blog- y que propiciaba esos encuentros de niños pastores, todos los niños de la
Canal por otra parte, era bien conocido y trillado por los maquis que tenían
fácil pedir, que no exigir, queso, leche de oveja o algo de pan con cebolla a
los mocés y mocetas. En Etiopía vi con nostalgia y ternura muchos niños
ganaderos este verano, responsables de 3 o 4 años de sus vacas… De allí venimos
no hace mucho tiempo.
Mi madre recuerda que los maquis pedían con mucha educación.
Por eso, uno de sus sustos infantiles fue la “manifiestación” en Berdún de
varios maquis balaceados por la Guardia Civil un domingo. No le cuadraba esa
crueldad y la exquisitez de su comportamiento en el monte.
El Tío Jorge.
Orensanz, Parque del Tío Jorge.
Recuerda mi madre, o así se lo ha referido mi tía Sofía de
Larués, también pastora con nombre de regente…, que Angel Orensanz gustaba de
tallar con la naballa figuras de boj sin uso. No tallaba cucharas o tenedores
como mi abuelo. Un día un maqui le vio tallar mientras le pedía comida y le
animó para que siguiera así, dando rienda suelta a toda su imaginación. Un
maqui que “tenía mucha cultura”… (¿el maestro de “Alas de Mariposa”?... España
y la necesidad de una derecha verdaderamente liberal…)
Esta es la historia de Orensanz relacionada con mi vida.
Nunca bien ponderado su currículo no vamos ahora a reproducir wikipedias. No es
el propósito de esta nueva sección, sino de proyectar orgullo sobre aragoneses
curiosos aunque quizá poco ejemplares.
Pensé en esta sección mientras paseaba por el Parque del Tío
Jorge y su preciosa, en mi opinión, escultura. No tanto por ella misma sino por
su relación con el parque y ahora con las cotorras argentinas.
Orensanz tuvo su momento rotondas pero ahora parece que ya
no está de moda el pop art ni él. A mí me sigue pareciendo muy original, el
mejor escultor aragonés de los últimos 50 años con Pablo Serrano y lamento que
el “Monumento a la Jacetania” lo hayan desplazado a una trasera de Jaca desde
la Plaza Biscós, donde tanta aura de modernidad confería a mi capital
sentimental.
Orensanz en Barcelona, junto a su maravilloso mural.
Algún amigo de Berdún lo habrá visto durante 5 años todos los días lectivos.
Sin embargo y recientemente, se ha preservado y potenciado la magna obra escultórica por el mismo
realizada en la Estación de la Línea 3 “Zona Universitaria”: el mural “Artes,
Ciencias y Letras”, magnífica alegoría de cadáveres cultos. Las imágenes
corresponden al mural y la escultura del Parque del Tío Jorge.
Otra cuestión bien interesante para matar un rato de sábado
lluvioso y viajar es entrar en su fundación americana –tiene una iglesia en New
York…-, la Angel Orensanz Foundation. Salud Orensanz, surco-escultor en Berdún
24 F Luis Iribarren.