Estos denarios de plata, de casi cuatro gramos cada uno, son previsiblemente procedentes de Zaragoza, del inicio de la ciudad de Caesaraugusta, unos pocos años antes de nuestra era. Vemos en el anverso la efigie de César Augusto, a cuyo nombre iba la ciudad, y por el reverso la inscripción "Divino Julio", una frase que hoy se traduciría por “San Julio”.Pero hay que decirlo con las naturales reservas.
Lo más curioso está en el reverso donde vemos un cometa de ocho rayos, con la cola del mismo en la parte superior a modo de llama. En el año 44 a.C. moría Cayo Julio César, también nombrado "augusto" o divino, a quien posiblemente esté dedicada esta moneda, y en ese año se pudo ver a la luz del día y durante siete días un cometa, avistado en Roma y del que también hay noticias en China.
Mis dudas sobre si estas monedas fueron realmente de Caesaraugusta vienen motivadas por el cambio en la clásica pareja de bueyes arando el perímetro de nuestra ciudad, que en esta caso se ha cambiado por esta estrella con llama o cometa que considerarían milagrosa. ¿Tal vez la famosa estrella que alumbró Belen? Grandes dudas.