Anoche esta blog alcanzó las 550.000 visitas, que no sé si son muchas o pocas pero aseguro que nunca fueron la meta cuando se abrió hace cinco años. Mucho ha llovido sobre nosotros desde entonces, y mucho sobre Zaragoza y Aragón. Muchas ilusiones apagadas, proyectos perdidos, ideas no practicadas y deseos llenos de buenas palabras que nunca se han logrado poner en práctica.
Nada es sencillo en esta tierra nuestra, aunque debemos ser optimistas y reconocer que algunos brillos empiezan a tomar presencia. Más comercio en la ciudad céntrica, algunos intentos por dotar de más arte y actividades culturales a nuestra Zaragoza, ciertos deseos de mejorar los servicios, un deseo de poner en valor el turismo como una actividad importante, saber dotar a Zaragoza de la presencia en medios nacionales e internacionales como una gran asignatura pendiente, asumir que los errores en industria y distribución hay que modificarlos con urgencia, aceptar que nos queda mucho por mejorar los transportes de todo tipo, seguir con el gran trabajo emprendido en acciones como Zaragoza Activa o Etopía, amar Zaragoza.
No son tiempos optimistas si hacemos caso a los cuervos. Pero si bien la Universidad de Zaragoza atraviesa un momento complejo, lo es también que somos muchos los que valoramos la necesidad urgente de cambiar esas dudas por optimismo activo. Los que sabemos que hay un inmenso grupo de zaragozanxs que están trabajando duro por revertir el pesimismo de una gran ciudad que tiene muchas posibilidades. Depende de todxs nosotrxs.