Todavía sigo sin comprender cómo pasa tan rápido el tiempo,
a tan solo un mes para el final de esta impresionante aventura por fin se ha
ido el frío y ha llegado el calor con máximas de 25ºC y un deslumbrante sol.
Lógicamente este mes ha estado protagonizado por el rugby,
como los meses anteriores, ya que ocupa la mayoría de mi tiempo. Ha sido la
primera vez que he jugado una versión de rugby llamada 7s (sevens) donde en
lugar de ser 15 los jugadores en el campo por equipo, son 7; me ha gustado
mucho pero creo que sigo prefiriendo la versión original donde tienes más
compañeras para apoyarte en el campo.
Este mes también he visitado nuevos lugares como Edmonton,
capital de Alberta, debido a un torneo de rugby, afortunadamente los entrenadores
nos dejaron visitar el centro comercial más grande de Norte América; para mi
sorpresa el equipo completo lo había visitado anteriormente ya que todo el
mundo de Calgary ha ido a Edmonton en numerosas ocasiones (podría decirse que
un calgariense es como un oscense, la mayoría han visitado la capital, en caso
de Alberta, Edmonton y en caso de Aragón, Zaragoza), lo cual me dio el
privilegio de tener un tour privado por ese centro comercial ya que unas amigas
del equipo muy entusiastas decidieron enseñarme todos y cada uno de los lugares.
Debo de decir que el centro comercial de Edmonton es el más impresionante que
he visitado por ahora, aparte de numerosas tiendas tienen un parque acuático e
incluso un campo de hockey sobre hielo. A pesar de no haber podido hacer demasiado
turismo, lo poco que vi me encantó.
Siguiendo con rugby, he tenido el privilegio de jugar contra
una de las becadas que está también en Calgary, fue genial poder jugar contra
una amiga, además, fue un partido muy intenso ya que solo ganamos por 1 punto.
Tras haber ganado todos los partidos de liga menos uno
conseguimos entrar en los playoff para el torneo de rugby de la ciudad de
Calgary, por ahora tan sólo hemos jugado cuartos de final, el partido más
intenso por ahora jugado ya que acabamos la primera mitad perdiendo por 12
puntos, pero salimos con muchas más ganas y energía en el segundo tiempo donde
tras varios intentos conseguimos marcar un ensayo (5 puntos) y una conversión
(2 puntos) seguimos soñando con una posible victoria, unos minutos después de
ese momento, conseguí marcar, decidí coger el balón en un penalti, chutarlo
ligeramente, coger el balón de nuevo y correr, tras un esfuerzo en la jugada
conseguí los 5 puntos que necesitábamos para empatar el partido, protagonizando
así uno de los mejores momentos de mi vida en Canadá, tener a todas las
compañeras felicitándome y celebrando el gol conmigo me dio todavía más fuerza
para jugar y ganar.
Tras permanecer los últimos minutos con un empate en el
marcador nos dirigimos a la prórroga, donde se vivió una intensa primera mitad
sin ningún punto marcado, en la segunda mitad volvimos con más ganas que nunca,
queríamos esa victoria y no íbamos a rendirnos, conseguimos marcar otros 14
puntos tras dos jugadas y dos conversiones; siendo el marcador final 26-12 y
llevándonos al partido de semifinales. Sinceramente, ahora no creo que a nadie
de mi equipo le importe demasiado el resultado de semifinales, lógicamente
todas queremos llevarnos la medalla de oro a casa, pero hemos formado una segunda
familia, hemos creado un equipo muy unido y a pesar de ser numeroso (somos 40
chicas en el equipo) todas nos llevamos muy bien, nos apoyamos en las derrotas
y celebramos las victorias.
Por ahora solo queda luchar por el título y, ojalá, poder
proclamarnos campeonas de Calgary, disfrutar de todos los momentos y gente
maravillosa, y del último mes que me queda en Canadá que si nueve meses han
pasado muy rápido, uno va a ser como un pestañeo.
Silvia Marqueta