El convento observante de los franciscanos “Nuestra Señora
de Jesús” estaba situado en la zona del Barrio Jesús de Zaragoza de donde toma su nombre,
cercano al convento de San Lázaro. Fue fundado por los franciscanos en el año
1447 y quedó destruido en la Guerra de Independencia, al estar en zona de fuerte
conflicto desde donde atacaron denodadamente las tropas francesas contra
Zaragoza, intentando apoderarse del Puente de Piedra. Antes de apoderarse de él
las tropas francesas era un punto estratégico desde donde se recogían alimentos
para la ciudad desde los campos de toda la zona del Arrabal.
La iglesia del convento tenía tras el sagrario una capilla
pequeña muy bellamente decorada según se comentaba en aquellos años, con
pinturas de estilo flamenco, todas perdidas. Disponía de claustro, sala
capitular y una interesante biblioteca.
Este convento lo fundó Francisco Herbas según unos (o Juan
Roldán según otros), que a su muerte fue sepultado en el mismo. En el altar
mayor tenía un retablo entre dos columnas con una buena pintura del entierro de
Jesucristo. En sus terrenos además de huerta tenían un cementerio en donde
reposaban los restos de grandes hombres de aquella Zaragoza que decidían apoyar
a los franciscanos del convento. Se dice que en el primer siglo llegaron a
habitar unos 65 hermanos y que en el censo de 1723 había viviendo 66 hermanos
franciscanos y que además del convento tenían un Aula Teológica donde daban
clases a los novicios que deseaban entrar a la orden.
Todo su terreno, el del edificio y sus huertas, fue vendido
como finca nacional a las nuevas fábricas que se instalaron en la zona, empresas
harineras y de almidón y gluten.
Nota.: Ha sido imposible lograr una imagen del plano mejor de calidad para poder leer los textos, pues pedían en el Archivo Militar un precio que no debo pagar para un sitio gratuito como este.