Son días exquisitamente muy interesantes, otra vez, para la política española. Cada vez interesa menos la política a los españoles, pero en cambio cada vez resultan más interesantes los asuntos que se van edificando alrededor de la política. Peligrosamente curiosa la mezcla de deseos y obligaciones.
Podemos, en un giro inteligente, anuncia una Moción de Censura contra el PSOE, aunque el que gobierna es el PP. Cosas de los juegos de manos. Lo cierto es que los españoles están muy cansados por ser suaves, o hasta los bebos por ser normal. Así que cualquier decisión puede parecernos incluso inteligente, pues todo está descompuesto.
En la Moción de Censura contra Rajoy el que tiene la papeleta complicad de veras es el PSOE que tome la decisión que tome se equivocará. Al final me imagino que a Podemos la dará rabia joderlos, y no la presentará. Pero el movimiento de piezas es precioso. Para nada. Sobre todo porque Rajoy es tan listo que parece tonto, y sabe otra vez más, que con mirar le es suficiente.
Mientras tanto en Europa nos miran con cara de asco, y nuestros nietos nos mirarán a nosotros con la misma cara. Somos incapaces, inútiles de buscar soluciones que es una fase anterior a encontrarlas. Y muy capaces de pasar página, con tal de olvidarnos rápido de nuestra incapacidad. ¿En qué tipo de países seguiría gobernando un partido con tantos conflictos judiciales, como aquí le pasa al PP?
Julio Puente