7.7.13

Cuidado. Estamos empezando a cabrear a los voluntarios de Zaragoza


Los voluntarios de Zaragoza, que tan excelente trabajo van realizando en nuestra ciudad desde que se refundaron allá por el año 2008 han puesto los puntos sobre las íes. Ellas están para ayudar pero NO para cubrir puestos de trabajo, no para suprimirlos ni para que las instituciones se los ahorren.

¿Dónde está el punto de inflexión? Pues lo han dejado muy claro y simple. Cuando una labor se convierte en necesaria con el tiempo, cuando una ayuda se demuestra necesaria y se reconoce importante y sobre todo que debe ser mantenida a medio largo plazo, ellos no deben ejercer ese trabajo. Deja de ser voluntariado para ser trabajo laboral.

Los voluntarios están para ayudar en aquellas labores puntuales que necesitan en el corto espacio de tiempo un apoyo social. Están para ayudar a las personas y no a las instituciones o a las empresas.

Si se detecta que el tranvía necesita de continuo una seria de personas que ayuden en puntos críticos de los trayectos, por poner un ejemplo, ya no es labor de los voluntarios sino de personas contratadas.
En tiempos de tanto desempleo mezclada con la crisis, hay que vigilar mucho los abusos en el trabajo del voluntariado.