13.10.15

¿Porqué la Virgen del Pilar es importante?

Ayer fue el Dia del Pilar, el día grande de las Fiestas del Pilar, día donde sin duda más personas durante todo el año salen a la calle a vivir el momento, a disfrutar de la compañía de sus amigos y familiares, a palpar simplemente el ambiente zaragozano.

Empezó muy bien la semana festiva con un Pregón de Carmen París EXCELENTE y una gran presencia de zaragozanos que están ansiosos de ver una renovadas Fiestas del Pilar, pues ya tocan cambios y modificaciones, algo no sencillo pues hasta ahora las actuales han funcionado bien. Pero para que nada muera, todo hay que renovarlo.

Ayer en la Ofrenda de Flores muchas personas y medios estaban pendientes de la procesión municipal para ver quien si y quien no. No se defraudó a nadie. Estaban los que quisieron, estuvieron bien los que tenían que estar por su cargo, y al final el Alcalde Santisteve y el Concejal Rivarés tuvieron el acierto de incorporarse a las labores de ayuda para confeccionar el tapiz de flores en vez de acudir a la clásica misa, estando con los oferentes en vez de con los curas. La diferencia es grande e importante. Nada tiene que ver el fervor popular con el fervor dirigido por una organización poco zaragozana y muy dada a vivir a costa de la sociedad.

La Ofrenda de Flores no es un ejercicio religioso aunque lo parezca. Al menos no lo es sólo. Como tampoco es necesario ser católico para respetar a la Virgen del Pilar, y es normal ser incluso agnóstico y creer en la Virgen del Pilar. Esto es más complejo de entender, pero se da, pues los símbolos trascienden a las creencias cerradas de las curias de los hombres. Desde tiempos ancestrales los seres humanos dentro de su razón, hemos creído en “algo” agarrados a las lógicas teorías del sentido de la vida. Ese “algo” ha sido de muy variado sentido, casi siempre sólo sustentado por la fé, pero que ha sido necesario para incluso engañarnos nosotros mismos y ser capaces de soportar la realidad de que al final sólo nos espera la muerte.

Por eso mismo, pero sobre todo por muchas más sensaciones de todo tipo, el papel y el símbolo de en este caso la Virgen del Pilar, debe ser respetado, cuidado e incluso mimado como una energía vital para una inmensa parte de la sociedad zaragozana al menos. Y en ese cuidado, el respeto debe formar parte básica que todos debemos compartir. Incluso el respeto a no creer en ella, a no creer en nada, a no creer más que en “otras cosas”. 
 
Julio M. Puente Mateo