Abstractas formas de colores variados nos inundan el recinto de la nueva Expo 2008. Son las nuevas maneras, los diferentes colores vivos que han servido para crear unos nuevos espacios, casi una nueva ciudad. Zaragoza ha ganado un gran espacio y ahora está ganando una restructuración de usos. Pero hay que cuidar los huecos que vamos dejando vacíos en los “centros”.