4.7.14

Antonio Aramayona y Joaquín Costa. Dos muy peligrosos licenciados en Filosofía

No vamos a descubrir a Joaquín Costa a estas alturas, aunque no estaría nada mal repasarlo y releerlo. Controvertido político hay que entenderlo desde el punto de vista de aquella España, de aquel Aragón de caquiques.

En el Colegio público Joaquín Coste de Zaragoza tiene colgada en la fachada esta gran pancarta con una frase maravillosa. 

Muy parecida a las que lleva en sus carteles Antonio Aramayona en la calle Alfonso y por la que le ponen multas y multas.  

Aramayona es solo profesor de filosofía y en estos tiempos no se puede ir por la vida siendo un filósofo, es molesto para los que solo saben ver dineros en billetes marrones. Ser filósofo no está de moda, rediez.

Pero volvamos a la frase de Joaquín Costa, otro profesor licenciado en Filosofía y político aragonés que también como ARamayona era cabezón y decía las cosas que sentía con dos…, con rasmia:

“Nuestra escuela es la sociedad entera, es la naturaleza entera; en una palabra… es el mundo”

No queda nada claro la peligrosidad de la filosofía. ¿O tal vez sí?