Cuando se viaja por otras ciudades es cuando más se valora el trabajo municipal y el de las asociaciones de vecinos de Zaragoza. He estado visitando algunos barrios de Madrid y puedo asegurar que los vecinos tienen que soportar unas calidades de servicios, de limpieza, de cuidado en su patrimonio de barrio muy diferente al que somos capaces de tener en Zaragoza. Y eso, todo hay que decirlo, se basa en dos pilares fundamentales que funcionan muy bien en Zaragoza: el trabajo de los grupos municipales y el gran trabajo de control y queja que se realiza por parte de los vecinos.
Así que no hay que medrar, no hay que olvidarse en seguir trabajando aunque tengamos tiempos duros y escasos, y en seguir valorando como muy positivo en trabajo que se hace y la calidad de vida de barrio de Zaragoza. Eso sin que nos entre el pensamiento que nos podemos relajar. Eso nunca.
Nos falta eso si, más inversión privada en negocios y servicios.