Ante el nuevo curso político se abren en Aragón innumerables
incógnitas, numerosas variables que hacen imposible predecir cómo llegaremos al
mayo del 2015, en qué posición se encontrará cada uno de los jugadores
políticos del hoy 1 de septiembre. Van a ser 8 meses apasionantes para los
pocos que quedamos en la política con el buen sabor de aprender y observar.
Aragón será uno de los espectadores importantes pues tiene
dos variables muy interesantes. Tenemos la única gran ciudad gobernada por un
socialista. Disponemos de un partido añadido que representa el aragonesismo de
izquierdas, que es el espacio ideológico donde se van a jugar los futuros
cambios. Si algo cambiará en España durante estos 8 meses es en el espacio de
la izquierda, hoy mareado, casi sin rumbo, cojo de ideas y programas, sin
poder.
Aragón va a tener que tomar decisiones políticas propias que
pueden marcar fracasos o éxitos a varias opciones políticas. CHA y el PAR van a
ser en mayo las dos opciones aragonesistas, de izquierdas y de derechas, que
pueden hundirse o reflotar entre un marasmo de posibilidades. ¿Qué harán cada
una de ellas?
¿Qué candidatos al Ayuntamiento de Zaragoza presentará el
PSOE y el PP? Está más o menos claro el candidato de UPyD. Ya está elegido por
sus militantes el candidato de CHA. Pero no sabemos quien será el de IU y con
más ansia de conocer tampoco sabemos nada del posible candidato de Podemos o de
Ganemos, que es la otra opción posible desde la izquierda. Del PAR no conocemos
nada de nada, pues todo son barullos entre ellos. Pero quedan 8 meses. De
Ciudadanos tampoco tenemos información sobre sus candidatos. Divididos,
agrupados, enfrentados, con programas diferentes, diluidos. No se sabe todavía.
Lo normal visto desde hoy es que el PAR se diluya dentro de
una candidatura del PP. Pero pueden tener tormentas internas. Incluso la lógica
nos dice que el acercamiento entre UPyD y Ciudadanos debería permitir una
fusión al menos electoral. Ya tenemos dos variables menos. Nos queda la gorda.
¿Qué hacemos con y desde el PSOE, CHA, IU, Podemos y
Ganemos, sin olvidar a Equo? Todos representan un segmento social muy parecido;
si no en sus dirigentes, si en sus bases sociales y militantes. Hay personas
muy progresistas dentro del PSOE, como hay casi conservadores humanistas dentro
de CHA o Equo. Hay comunistas en IU y Podemos y hay anticomunistas en el PSOE y
en CHA. Pero esto son detalles menores para la sociedad que vota y que quiere
resultados válidos para la sociedad más necesitada. Los ciudadanos son los que
eligen.
Si juntáramos a los militantes del PSOE, CHA, Equo, IU,
Podemos y los movimientos sociales de izquierda de Aragón en una plaza pública
serían capaces de encontrar acuerdos de trabajo conjunto. Sin duda. Si
juntáramos a los dirigentes de todos estos partidos y asociaciones terminarían
en un sinsentido. Esa es la gran diferencia entre lo posible y lo imposible.
Son muchos años de trabajar separados y encontrados y así es muy complejo
encontrar sinergias válidas, de las de verdad y no de las cuyunturales.
Algunos partidos reúnen a sus militantes para que opinen y así
recoger sus planteamientos. Pero esto, siendo lo único que se puede hacer —¿lo
único?— no sirve hoy. A estas reuniones van siempre los mismos, y entre los que
van solo hablan otra vez los mismos de los mismos. Antes de entrar ya sabemos
quien hablará más, qué dirá y que postura ganará. No hace falta convocar a
nadie si antes no somos capaces de convocar a más y sobre todo a todos. Hablan
sobre todos aquellos dirigentes que llevan años anclados en sus puestos y que
llegaron hasta allí por diversos motivos democráticos en casi todos los casos
pero en unos tiempos muy diferentes a los actuales y que en muchos casos además
de defender sus ideas defienden también sus puestos de trabajo. Esto es duro de
decir, pero no hay que callarse si se quieren buscar soluciones. ¿O pensamos
que Podemos está creciendo por casualidad? ¿O tal vez es por causalidad?