Tras la compra de Hispano Carrocera en Zaragoza, por la
empresa india Tata Motors, hace 4 años, parecía renacer el interés hacia
Zaragoza como ciudad industrial del automóvil.
Muy posiblemente todo era una gran mentira, para quedarse
con la fama, el mercado, los clientes de Hispano Carrocera y luego ir transfiriéndolos
poco a poco al resto de sus fábricas en medio mundo.
Ahora Tata Motors cierra, deja a 300 familias zaragozanas
sin trabajo, y una deuda de 38 millones de euros en los cuatro años de su
gestión.
La empresa Hispano Carrocera se fundó en Zaragoza en el año
1939 dedicada a fabricar carrocerías para autobuses de varias marcas muy
conocidas, tanto urbanos como de largo recorrido, con gran calidad y diversidad
de diseños.
La empresa india Tata pasó de tener un 21% de la empresa
desde el año 2005 a comprar el 100% en el año 2009, cuando Hispano empezaba a
tener pérdidas y la compra resultaba mucho más barata. Ahora, cuatro años
después, con una pérdida de calidad en sus productos reconocida, ha sido imposible
soportar la crisis de pérdida de matriculaciones. Pero Tata Motors se va con su
trozo de tarta y nos deja la deuda y los despedidos.
Los trabajadores van a intentar formar una Sociedad Anónima
Laboral, posiblemente capitalizando el desempleo. ¿Pero es posible pagar las
deudas y abrirse nuevos mercados, en competencia con su anterior dueño, Tata
Motors, acostumbrando a bajar precios y calidad?