He tenido ocasión de visitar el Camping municipal de Zaragoza, inaugurado para la Expo 2008 en la zona de Rosales del Canal, sobre un ligero montículo en la orilla del Canal Imperial.
Su ubicación es algo alejada del centro de Zaragoza, sobre todo si se desea contar con su servicio para atraer turistas a la ciudad, pero es entendible que una instalación de este tipo necesita de un espacio complicado de encontrar en una zona más cercana a los centros de las ciudades grandes.
Pero sus servicios y precios si que no son de recibo para una ciudad como Zaragoza, que debe aspirar a una excelencia a la hora de conquistar nuevos turistas, por ser una ciudad del interior sin excesivas posibilidades de lograr mercados turísticos estables.
Pasar una noche en un bungalow del camping municipal (aunque lo lleve por contrata una empresa privada) cuesta 100 euros para una familia de hasta 4 personas, aunque el tamaño del bungalow lo hace incluso justo para dos personas. Al menos el que yo visité, sin tan siquiera un pequeño porche para tener sombra. Si que es cierto que los servicios interiores del bungalow eran normales con un aire acondicionado más que suficiente.
Toda la instalación dispone de caminos y calles de tierra y asfalto, pero carece de zonas verdes en su zona de bungalow y de árboles que puedan ofrecer sombra. Algo que deberían haber resuelto de alguna manera —en serio—, pues un día de calor con máxima de 35º era insoportable circular por el interior del mismo.
La única zona de hierba y sombra está junto a la piscina, pero su cuidado es muy deficiente. Cualquier piscina municipal de Zaragoza es mil veces mejor que esta piscina, que también utilizan los vecinos de Rosales del Canal.
Dispone de campos deportivos en muy buenas condiciones, pero resulta imposible salir a pasear por la zona del Canal Imperial cercana por motivos de seguridad interna, obligando a los clientes a dar una larga vuelta si desean gozar de un paseo algo más fresco y con sombra.
Zaragoza tiene camping, sin duda resuelve el servicio a quien desee acampar una noche en nuestra ciudad, de recorrido por España, pero no es un servicio agradable como para que los clientes decidan quedarse varios días en nuestra ciudad. Se requiere un análisis serio de sus posibilidades y mejoras, algunas relativamente sencillas y lógicas, si en verdad queremos dar este servicio con el apellido de “municipal”.