Una encuesta realizada por la Unión de Consumidores de Aragón (UCA) revela que más del 27% de los zaragozanos admite seguir consumiendo más agua embotellada que antes, y un 16% solo bebe la comprada en comercios. Es decir, más del 43%, frente al 23% que solo consume el agua del grifo de Zaragoza y el 34% que dice gastar más del grifo que adquirir embotellada.
En estos momentos el agua que sale por los grifos de Zaragoza no sólo es perfecta en control de calidad e higiene para nuestra salud, sino además excelente de sabor. No tiene nada que ver con el agua de hace unos meses, y sin duda absolutamente diferente a la de hace unos años. Es un agua pública de grifo perfecta, a la altura de las mejores aguas de grifo de España y muy barata.
Por eso no tienen sentido las respuestas de la encuesta. Que haya tantos zaragozanos que sigan consumiendo agua embotellada demuestra una mala comunicación pública del agua que se consume en Zaragoza o un descreimiento por parte de muchos zaragozanos de lo que se le dice desde los organismos públicos. Un gasto inútil que precisamente en periodos de crisis se debería valorar. Más si cabe por el simple motivo de que los zaragozanos no pagamos el precio real del agua que consumimos. Hay pues que realizar un intento más para que se sepa la calidad excelente del agua en Zaragoza, precisamente en tiempos en los que es de las mejores que hemos tenido.