El pintor casi madrileño y Premio Príncipe de Asturias de las Artes, Antonio López ha preparado un boceto para una cúpula o bóveda de El Pilar en Zaragoza y no ha gustado a las autoridades eclesiásticas que son las que tendrán que dar el visto bueno final.
Sinceramente a mi, tampoco me gusta. No me gusta que haya sido un discípulo quien haya realizado el boceto aunque con indicaciones del genio Antonio López, no me gusta que me hagan de menos, lo siento; pero sobre todo no me gusta el boceto en si. De acuerdo con el pintor en que una pintura religiosa del siglo XXI no puede ser igual que las del siglo XIX, pero un dibujo infantil no debe ser respetable pues hay cientos de diseñadores en Aragón, capaces de trabajos mucho mejores que esta obra, y que servirían mejor para indicarnos que la Virgen mira Zaragoza desde el cielo.
No, El Pilar se merece algo mejor, y la firma no es todo en ninguna obra. Interesa que un genio como Antonio López está representado en El Pilar de Zaragoza, junto a Goya o Bayeu, pero no con una obra menor, no con una obrita de pasar el susto o el tiempo que le sobra al maestro. Así que se debe exigir algo más trabajado, y no por eso sucederá nada, aunque sea a Antonio López. O él entiende (se lo sabemos hacer entender) que es una obra para algo más que para cobrar y a otra cosa, o será mejor que abandone el proyecto.