El Ayuntamiento de Zaragoza está a punto de cometer, previsiblemente y si hacemos caso a lo que publica hoy Heraldo de Aragón, a otro error más a la hora de negociar con Madrid la cesión de la Avenida de Cataluña como calle municipal, ya que ahora sigue perteneciendo al Ministerio de Obras Públicas.
Las inversiones necesarias para arreglar estos 4 kilómetros de avenida rondan los 25 millones de euros. Durante muchos años el Ministerio de Obras Públicas ha estado dispuesto a entregar a la ciudad de Zaragoza la titularidad de esta avenida, y si nunca se ha admitido por parte de los gestores del Ayuntamiento ha sido porque nos la revertían a Zaragoza en las actuales condiciones, sin arreglar, es decir “gratis” y sin presupuesto para que tenga una calidad similar al resto de calles de Zaragoza. Y estamos hablando de periodos en los que las economías del Ayuntamiento de Zaragoza estaban bien.
Recibir ahora, en periodo preelectoral y sin acompañamiento de una partida económica que sirva para resolver los graves déficit que tiene esta zona de Zaragoza, es un error absurdo. No es ni mucho menos lo que necesita la ciudad de Zaragoza.
Admitir la cesión de titularidad es para que vaya acompañada de los arreglos necesarios, nunca de pequeños parcheos, nunca sin una partida económica suficiente para resolver los problemas de esta Avenida de Cataluña que dura décadas.
Los vecinos necesitan aclaraciones, necesitan soluciones. Lo que no necesitan son decisiones rápidas por que todos los grupos políticos que se presentan a las elecciones, hayan ido a hablar con los vecinos, para conocer de primera mano sus demandas. No se trata de seguir engañando otra vez más a los vecinos. Es muy sencillo todo. SE trata de resolver los problemas.
Y en estos momentos no hay más que una solución. El Ayuntamiento de Zaragoza debe recibir a los representantes de los vecinos y explicarles cómo está la situación. Es lo menos que ellos se merecen.
Nadie pide para la Avenida de Cataluña la calidad del Paseo de Independencia. Los vecinos solicitan una calidad como la que tienen de media las avenidas en Zaragoza. Hoy es unaavenida con serios problemas que irán en aumento en los próximos meses y años, por pura lógica social.