24.11.24

La Zaragoza de los enormes toldos


El Coso zaragozano en la plaza de España, en la zona de entrada a su mítico Tubo, a principios del siglo XX. Se mantiene el círculo como diseño de la plaza, pero muy poco más.

Ya no queda casi nada de aquella imagen, pero resulta curioso ver los carteles, las personas andando por toda la calle y los tranvías y carros avanzando en la zona que hoy es un enorme velador ara tomar cafés, una vez que toda esta zona se ha convertido en peatonal y en servicio de hostelería.

Era una Zaragoza bastante tapada por enormes toldos, una Zaragoza que buscaba la sombra. Y que no tenía aire acondicionado de forma artificial, por lo que había que recurrir a evitar que el sol entrara en los locales de ocio.