Me resulta encantador y sorprendente el gran número de esculturas de personas que tenemos en cada una de nuestras ciudades. Muchas de ellas estarán dedicadas a alguna persona, santa o Virgen, pero no son bien conocidas por los habitantes de la ciudad.
En Zaragoza tenemos ejemplos de ello en varios lugares. Os pongo una imagen que decora la parte alta de la fachada de El Pilar, en el frente hacia la calle Alfonso. Parece una mujer que lleva una bandeja de flores, es Santa Isabel de Portugal y de Aragón, pues aunque era hija del rey Pedro III de Aragón, pero cambió su nombre al casarse con con el rey Dionisio I de Portugal.
Cuentan que Santa Isabel daba a menudo monedas del Tesoro Real a los pobres para que pudieran comprarse pan cada día. El Rey Dionisio I de Portugal sospechaba de esto, y comenzó a vigilarla. Cuando la Reina Isabel comenzó a dar monedas a los pobres, el rey portugués enfurecido fue a reclamarle la bandeja donde conservaba las monedas que repartía. Algo sucedió, pues cuando el Rey le pidió que le enseñara lo que daba a los pobres, las monedas se habían convertido en rosas. Por eso aparece en la estatua de El Pilar con una bandeja de tela llana de rosas.