En la imagen, la estatua de San Andrés Avelino (uno de los creadores del postumismo, al que dio nombre y dotó de su base teórica e ideológica. Al dejar de lado este movimiento, cultivó un tipo de poesía a la que llamó metafísica), de la iglesia de San Cayetano de Zaragoza.
Esta iglesia es sobre todo conocida en Zaragoza, por ser ella desde donde salen todos los pasos de la Semana Santa, que han dormido del Jueves Santo al Viernes Santo en su interior.
La iglesia de San Cayetano o de Santa Isabel de Portugal está cerca del Mercado Central de Zaragoza, en pleno Caso Antiguo de la ciudad, en la Plaza del Justicia y enfrente del Edificio que alberga el Colegio Notarial de Zaragoza.
En 1678 la Diputación del Reino de Aragón decidió levantar un templo en honor a Santa Isabel de Portugal y tras llegar a un acuerdo con los padres teatinos o cayetanos, en 1681 se comienzan las obras en el solar que éstos tenían reservado para su propio convento. Fue finalizada en 1706 por orden de la Diputación del Reino de Aragón
La tipología de esta iglesia, en cuanto a planta y distribución interior, sigue el modelo de San Cayetano de Madrid. Este a su vez, repite modelos procedentes de Roma.
La fachada está realizada en alabastro blanco y oscuro, mármol negro, yeso dorado, siendo de estilo churrigueresco. Los maestros ensambladores Jaime Ayer y Francisco Pérez Artigas presentan una iconografía compleja. Aparece la Cruz de San Jorge, los símbolos y el escudo de Aragón, etc. De las esculturas, destacan la de Santa Isabel de Portugal, reina de Portugal nacida en la Aljafería, y la de los santos teatinos Andrés Avelino y Cayetano de Thiene.
El interior tiene la forma de una cruz griega inscrita en un cuadrado siguiendo el modelo italiano. El techo está formado por una cúpula central y otras cuatro menores en los brazos de la cruz. A destacar el retablo mayor, realizado por Ramírez de Arellano y su taller entre 1750 y 1760 en mármoles, jaspes y madera policromada. También es interesante el cuadro de San Jorge alanceando al dragón, la capilla de la Hermandad de la Sangre de Cristo, con la escultura del Cristo de la cama que sale en procesión en Viernes Santo, y la capilla de San Jorge finalizada por José Baqué en 1963.