En aquella
Zaragoza del año 1809, derrotada, destruida, llena de cadáveres, sin orden
político, sin moral para poder seguir vida, llegan los franceses tras los dos
Sitios y la toman como punto geográfico importante en sus deseos de apoderarse
de toda la sociedad de España. Los ciudadanos vivos y sanos de Zaragoza eran
pocos, desnutridos y desmoralizados. En las primeras semanas siguen
produciéndose crímenes, detenciones, ajusticiamientos y muertos.
Los franceses
estuvieron en Zaragoza desde el año 1809 hasta el año 1813. Cuatro duros años
que ellos disfrazaron para congraciarse de los zaragozanos, realizando obras y
fiestas, subiendo impuestos pero intentando modernizar y reconstruir una ciudad
destruida.
Zaragoza
pasaba a ser gobernada por el Mariscal Lanner, luego por el General Junot y
finalmente por el General Suchet, convirtiendo a Zaragoza en Capital de una
especie de Virreinato de toda esta zona del este español.
Había que
reconstruir Zaragoza y uno de los primeros edificios sobre los que se empezó a
trabajar fue el Palacio del Conde de Fuentes, en la entrada del Coso, en la
trasera del Convento de San Francisco y que está coloreado en la imagen, para
instalar allí la Sede del Gobierno francés en Zaragoza. El 1 de agoto del año
1809 el Gobernador Suchet se cambia a este edificio, como sede privada y
pública desde la que se gobierna todo Aragón y parte de Cataluña y Valencia. En
los jardines que existían en la trasera se llegaban a realizar grandes fiestas
para los militares importantes franceses pero también para las autoridad
civiles zaragozanas.
En la
actualidad este edificio está desaparecido y en su lugar se edificó el antiguo
Banco de Aragón, actual Banco Santander. A mediados del siglo XIX se instaló en
el Palacio del Conde de Fuentes el edificio de Correos. Incluso antes de la
Guerra de la Independencia y por un breve periodo de tiempo fue Academia de
dibujo y Pintura donde se dice participaron los pintores José Luzán y Francisco
Bayeu.